
Errores frecuentes al conservar el Aceite de Oliva Virgen Extra
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El aceite de oliva es una grasa saludable muy importante en la cocina mediterránea. En todas las casas de Portugal, España, Italia o Grecia es común encontrarlo para su uso diario en la cocina.
La conservación adecuada de un Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE) es clave para mantener el sabor, el aroma y sus beneficios saludable. Una mala elección de conservación puede hacer que la grasa pierda propiedades organolépticas y de salud. Especialmente si se trata de un AOVE sin filtrar.
Error #1. Almacenar el Aceite de Oliva cerca de fuentes de calor
El calor tiene una influencia importante en la calidad de cualquier grasa. Incluso por encima de 20ºC o 25ºC, la presencia de calor provoca una oxidación acelerada y una pérdida de aromas.
De la misma manera las temperaturas negativas hacen que la textura del aceite se resienta y por debajo de su punto de congelación se destruyen las cadenas de aminoácidos que lo forman.
Su temperatura ideal de conservación es de unos 15ºC - 20ºC si se está consumiendo o algo menos si solo se está conservando.
Error #2. Exponer el aceite a la luz solar directa o artificial
La luz, especialmente la solar, activa reacciones químicas que provocan la oxidación rápida del aceite. Eso hace que además de una reducción de su frescura, adquiriendo olores rancios o desagradable, disminuyan sus antioxidante naturales, reduciendo las propiedades beneficiosas del aceite.
Todo ello provoca una reducción de su vida útil. A pesar de que la fecha de consumo preferente desde su envasado es de dos años, la exposición frecuente a la luz acorta considerablemente el tiempo que el aceite conserva todas sus propiedades saludables y organolépticas intactas.
Para evitarlo, los Aceites de Oliva Virgen Extra vienen en envases oscuros u opacos y almacénalo en un lugar fresco, seco y protegido de fuentes luminosas.
Error #3. Dejar el envase abierto o mal cerrado
Al contacto con el aire el aceite pierde propiedades y se oxida. Es recomendable cerrar correctamente la botella tras cada uso. Las soluciones de envasado bag-in-box son una buena solución ya que permiten un almacenaje perfecto tras cada uso debido a su grifo incorporado.
El uso de alcuzas, aceiteras o los envases de cocina también provocan la oxidación y la aparición de un sabor rancio en el aceite. Donde mejor se conserva un Aceite de Oliva Virgen Extra es en su botella bien cerrada.
Error #4. Almacenar el aceite durante demasiado tiempo
Debido a las reacciones químicas naturales que se producen en el aceite a lo largo del tiempo pierde propiedades de sabor y frescura. Aunque el aceite no caduca, es un alimento de consumo preferente. Esto quiere decir que un aceite tiene una fecha recomendada para su consumo desde su envasado de dos años.
Una vez abierto el AOVE dura sobre 3 a 6 meses siguientes como máximo. Si tenemos aceite antiguo en la cocina y no sabemos que hacer con él, podemos utilizarlo para freír, dando un calentón a unos 180ºC antes para asegurarnos que pierde los malos sabores y olores.
Error# 5. Utilizar envases demasiado grandes para el consumo doméstico
Los últimos años venimos experimentando una reducción de miembros de los hogares y se han popularizado envases más pequeños. Optar por un envase de 3L o incluso de 2L hace que, aunque tengamos que comprar más veces, el aceite se mantenga siempre fresco, ya que se envasa bajo demanda desde depósitos inertes con nitrógeno para evitar su oxidación.
Los AOVEs de Cosecha Temprana o alta gama se suelen comercializar en botellas de 500ml, 250ml o incluso 100ml para su uso ocasional dada su frescura y el uso más ocasional en la cocina.
Si quieres aprender más, te recomendamos nuestra guía para el uso de aceites de oliva virgen extra en la cocina.
Foto de Annie Spratt en Unsplash